Comenzó con éxito la campaña de la Provincia para recolectar basura electrónica

Con gran repercusión se lanzó la campaña de recolección de basura electrónica que lleva adelante la Subsecretaría para la Modernización del Estado, a cargo de Lic. Roberto Reale, en conjunto con la Facultad de Informática de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), que desarrolla el proyecto E-Basura.

En el marco de la mega muestra de ciencia y tecnología, Tec La Plata, la Provincia instaló un camión en el estacionamiento del predio de la República de los Niños, donde los visitantes de la muestra llevan sus computadoras, notebooks, monitores, teclados, mouses, parlantes, celulares, entre otros materiales electrónicos que ya no utilizan.

“El gobernador Daniel Scioli prioriza el cuidado del medio ambiente, y la basura electrónica es otro tema del que también nos estamos ocupando. Por eso alentamos esta iniciativa y la impulsamos comenzando por casa, estamos donando el equipamiento en desuso que hay en la Gobernación. Queremos concientizar a la gente sobre el consumo responsable de la tecnología y sobre la posibilidad de su reparación y reutilización con fines sociales”, expresó Reale.

El material recolectado será trasladado al predio que la Provincia le concedió a la Universidad, ubicado en 3 y 525, donde el equipo de la Facultad de Informática de la UNLP lo restaurará, para luego ser donado a instituciones que lo necesiten. Aquellos materiales que no puedan ser reutilizados serán enviados, para colaborar con el cuidado del medio ambiente, a una empresa que tiene a cargo la disposición final segura de los elementos tóxicos y/o contaminantes que contienen los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), evitando así su estadio final en quemas y basurales.

“Me parece que es muy importante que las instituciones públicas trabajen mancomunadamente, yo creo que esto es un signo de madurez. El proyecto E- Basura es muy interesante y la Provincia ha sido muy solidaria porque también nos ha dado un espacio físico”, sostuvo Fernando Tauber, presidente de la Universidad Nacional de La Plata.

En la actualidad los productos electrónicos tienen una vida útil muy corta, lo que se denomina “obsolescencia programada”; esto se suma al incesante avance de las nuevas tecnologías que provoca que los aparatos queden desactualizados cada vez más rápido.

En Argentina, cada habitante genera alrededor de 3 kilogramos de basura electrónica por año, lo que representa 120 mil toneladas anuales. Aproximadamente la mitad de estos materiales están arrumbados en oficinas, depósitos y hogares. Se estima que el 40% es arrojado a basurales y rellenos y cerca del 10% ingresa en esquemas informales o formales de gestión de residuos.

Otro dato alarmante que brinda el último informe de Greenpeace sobre Basura Electrónica es que en 2011 los argentinos descartaron 10 millones de celulares. La problemática actual del gran aumento de los residuos electrónicos preocupa principalmente por su alto grado de contaminación para el medio ambiente.

Para avanzar en el tratamiento de esta basura electrónica, la Provincia, a través de la Subsecretaría para la Modernización del Estado, decidió apoyar el proyecto E-Basura desarrollado por la Facultad de Informática de la Universidad Nacional de La Plata, y lanzar en conjunto esta campaña.
“La campaña está bárbara. Nosotros teníamos cosas desde hace dos años y la realidad es que en el taller no teníamos más lugar para almacenarlas. Nos enteramos de la campaña y hoy vinimos a traer 16 CPU, 8 monitores y 8 impresoras, esperemos que las puedan reciclar y le lleguen a alguien que lo necesite”, expresó Pablo, empleado de una empresa local de soluciones informáticas que se sumó a la iniciativa.
Cuando la basura electrónica se tira en rellenos sanitarios, basurales clandestinos o quemas, los componentes peligrosos se liberan y migran por el ambiente, resultando tóxicos para la salud. Por ello, otro de los objetivos de la campaña es concientizar a la sociedad, difundiendo información respecto a la contaminación que generan los RAEE.
Asimismo, resulta importante destacar que el 96% de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos se puede reciclar. En tal sentido, el decano de la Facultad de Informática, Javier Díaz, explicó que “El Proyecto E- basura tiene un fin social y busca crear conciencia ambiental.”
Por su parte, Viviana Ambrosi, directora del Proyecto E-Basura de la UNLP, destacó: "El Proyecto E-Basura basa su trabajo en la concientización ambiental provocada por los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, el reacondicionamiento y reutilización del equipamiento informático en desuso para ser donado a instituciones de bien público para contribuir a reducir la brecha digital y finalmente la formación en el oficio de reparación de PC como forma de inclusión social, incluyendo en toda la cadena la formación de alumnos extensionistas de la Facultad de Informática fomentando la Responsabilidad Social Universitaria".