Nomás ha pasado un mes desde aquel instante en que apuñalaron al sol y el viento le puso alas a la luz de su sonrisa. Fue cuando nos quedamos a oscuras, con la bronca en la voz cargada de palabras inútiles y sin cobijo para el alma. Ya la ausencia sabe a eternidad y, apenas, ha pasado un mes.
Sólo preguntas quedaron, sólo preguntas que esperan respuestas que laven el sufrimiento para que, dignos en la búsqueda del tiempo en que reflorezca la tierra, recuperemos la alegría que el viento encerró en algún rincón de la memoria.
v ¿no deberían ir por zonas periféricas, lejos de los espacios transitados por la gente, los cables de media tensión que se entretejen por sobre nosotros como perfecta telaraña, insegura, desprolija, antiestética?
v ¿no debería ser subterránea su instalación?
v ¿por qué la bici senda se está construyendo, justamente, debajo de la línea de media tensión?
v ¿hay alguien que hoy pueda hacerse responsable de afirmar con toda certeza que no existen inconvenientes con el tendido de la red de energía en Sierra de la Ventana, que no se cortará otro cable o caerá un poste cuando sople el viento a gran velocidad?
v ¿cuánto electromagnetismo recibimos en nuestros cuerpos gracias a las instalaciones aéreas?
v ¿qué refrigerante utilizan los transformadores? Porque si es PCV es altamente contaminante…
v ¿qué se está haciendo en nuestra Sierra de la Ventana para cambiar el estado actual del tendido eléctrico y que no pase el tiempo enterrando todo recuerdo sin enterrar los cables que serán más y más según crezca la población?
v ¿qué organismo técnico realiza el control permanente de lo que se planifica, material que se usa, instalación que se decide?
Dicen que en los pueblos nunca pasa nada y será por eso que, cuando pasa y es irremediable, no hallamos las palabras para explicar lo que pasó, Pero de nada sirve buscar justificativos, lo que el hecho exige es compromiso y acción inmediata para modificar la situación actual tomando como ejemplo a los lugares del mundo – grandes o pequeños – que han comprendido que la seguridad, el paisaje, la ¡VIDA! son mucho más importante que el mero transporte de energía y planifican sus tendidos subterráneos con miras a ahorrar en mantenimiento, a evitar caídas de postes y cortes de cables y en suma, ganar seguridad en las calles.
No hacen falta muchas palabras para contar lo que pasa. Las cosas se cuentan solas si es que sabemos mirar...
Por Karina y Fátima… por Sierra de la Ventana, por la vida.
NORMA FERNANDEZ - PRESIDENTE ONG AMBIENTE COMARCA
PERSONERIA JURIDICA Nº 32073
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