Por este medio, queremos dejar en claro cómo sucedieron los hechos caratulados: “Tres detenidos por venta de droga en Sierra de la Ventana”.
Nuestra intención no es criticar la labor policial, sí las formas, el accionar y la difusión errónea en éste caso.
En cuanto a Julián Ocampos y Nelson Pérez, no están involucrados en la causa, sólo estuvieron demorados unas horas en el destacamento policial, para prestar declaración por el auto en que circulaban. Los mismos en el momento que comienza el operativo, se encontraban en el predio del Club Atlético Ventana, en la calle Galileo Galilei.
Aproximadamente a las 16:30 horas, Julián y Nelson pasan por la esquina de Pettorozzo, que al ver que se encuentra cerrada por patrulleros, impiden la circulación. Éstos, retoman otra calle donde a tres cuadras los detienen, los maltratan, los insultan y los obligan a dirigirse al domicilio de Pettorozzo, (donde el operativo había comenzado casi dos horas antes). Cabe aclarar que no se entiende por qué los dirigen a ese lugar y no al destacamento policial, como corresponde, agregando que continuaron con los maltratos y agresiones. Esposan a Julián y a Nelson lo suben al patrullero, intimidándolos para que declaren en contra del presunto imputado. De ahí que la policía de Sierra de la Ventana, los inculpan de encubrimiento. Aclaramos que desde que llegaron a la comisaría los encierran en el calabozo alrededor de 6 horas (maltratándolos moral y psicológicamente), y no les toman declaración mientras estuvieron detenidos, porque no estaban implicados en dicha causa.
Hasta acá cabe destacar que por la infracción cometida por el auto, sólo tendría que haber sido una contravención.
Los integrantes de la familia nos hicimos presentes infinidades de veces para saber la situación y siempre la respuesta fue: “Quédense tranquilos Ocampos y Pérez no están imputados en la causa”, por lo cual fueron liberados alrededor de las 23: 00 horas.
Destacamos también, que los familiares fuimos maltratados y echados del destacamento en ese momento por personal policial local, cosa que no paso con la gente de la DDI que siempre fueron muy respetuosos en el momento de dirigirse hacia nosotros.
Esta nota no aliviana la humillación que tuvimos que sufrir, tantos los chicos como los familiares, y aclaramos que todo lo aquí expresado es comprobable, existiendo documentos y testigos de lo ocurrido.
Muchas gracias.
Belén Valles 31622781
Claudia Arias 14556077
Graciela Dolera 16355577
Julián Ocampos 29984165
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