Desalojo en el Plan Federal de Bahía Blanca

Anoche, a las 21 horas, empezó el desalojo de los ocupantes del complejo de viviendas del Plan Federal. La policía de la provincia realizó la lectura de la orden judicial que indicaba la orden de desalojo, mediante los medios más viables. Con tensiones y asambleas, un sector aceptó acceder al mismo de manera pacífica, mientras que otro de manera inmediata se resistió. Estaban presentes en el lugar, representantes de organizaciones sociales y sindicales que garantizaban la salida pacífica del conflicto.

Ya comenzada la tarde se vislumbró nerviosismo por el refuerzo policial presente en el predio, intervención que se concretó a las 20,30 hs. con el corte vehicular por parte de Tránsito del municipio de Bahía Blanca. Los vecinos que tomaron las casas hace más de 10 días resolvieron evacuar sus pertenencias personales, aunque la salida definitiva se logró acordar recién avanzada la medianoche.

El compromiso por parte de las fuerzas de seguridad consistió en pactar una solución acordada. Luego de conversaciones, discusiones y asambleas conjuntas con "cercos humanos"- conformado por miembros de la CTA, partidos de izquierda y organizaciones obreras- en las cuales, no faltaron gritos, canticos en contra de la medida catalogada como la "falta de compromiso de la Municipalidad local".

"En la plaza, frente al intendente, somos más, acá estamos en un ghetto, nadie nos escucha. Ahora nos vamos a instalar en el centro hasta ser escuchados." Los ocupantes entendieron que la toma estaba agotada en estas condiciones y se ponía en peligro la integridad física de los vecinos, particularmente, los menores, mujeres embarazadas, personas con discapacidad y mayores que resisitieron en busca de solución a su necesidad de viviendas. "Nos mienten, esperemos que este no sea un fracaso nacional, estamos anotados hace años y ahora no tenemos cómo volver a pagar nuestros alquileres, muchos nos quedamos encerrados en la toma y perdimos nuestros trabajos" comentó una mujer de 30 años mientras lloraba.

Encolumnados marcharon caminando las 30 cuadras que los separaban del microcentro bahiense, en el camino, gestionaron la representación vecinal de la gente del Barrio Napal, tomado, también, hace dos días. Con colchones, carpas y reposeras se instalaron en la Plaza Rivadavia esperando ser atendidos por el Intendente Gustavo Bevilacqua y su secretario Diego Palomo, quienes habían dado por terminada su intervención calificada, según sus declaraciones, como "exitosa", muy distante de la posición y preocupación de los vecinos ocupantes. "Nos castigaron con el corte de los servicios, sin agua, sin electricidad, sin posibilidades de salir, las restricciones en relación con la comida fueron graves. Hubieron mayores y niños con diarrea, que vinieron a atender por la gran cantidad de llamadas al 911 y el auxilio que recibimos de la comunidad" se escuchó entre los voceros. "Ahora nos amenazan con un desalojo violento en manos de Gendarmería, estamos desilusionados, vamos a seguir peleando por nuestras casas y las de las 226 familias que estuvieron denunciando esta situación en este lugar."

Finalmente, los vecinos resolvieron dejar el predio, acordaron hacer visible su demanda en el lugar público más relevante y dicen presente a estas horas en el centro bahiense.

Natalia Schnaider